El caballo es un animal elegante, noble y con mucha personalidad; características que podemos trasladar de múltiples formas a nuestro hogar. En éste artículo te vamos a dar ideas sencillas que podrás aplicar a tu casa para darle un toque ecuestre muy especial.

Incorporando cuadros relacionados con el mundo ecuestre podemos cambiar una estancia sin la necesidad de hacer grandes modificaciones o invertir mucho dinero. No hace falta que sean pinturas o lienzos dónde el caballo salga a cuerpo entero, sino que también podemos centrarnos en elementos más específicos en un primer plano cómo puede ser un ojo.

Además, si practicáis o habéis practicado el deporte de la equitación dispondréis de elementos cómo botas, trofeos o un antiguo estribo que, con imaginación, podrán ocupar un rincón de vuestra casa. No tengáis miedo a arriesgar, ¡cualquier idea es buena!

Otro elemento al que podemos sacar mucho partido es la herradura. Situarla en la puerta de la entrada o en cualquier otro espacio que consideres adecuado puede ser una idea muy original. Eso sí, según dicen, es necesario situarla en forma de U para que te traiga buena suerte y te proteja.

Referente a los colores, a pesar de que las tonalidades de pelaje de los caballos son muchas, podéis centraros en colores tierra, beige y blanco que son de los más populares del mundo ecuestre y pueden combinarse con cualquier tipo de mobiliario.

Tanto si optáis por pequeños cambios cómo por grandes elementos la cuestión es que os sintáis cómodos en las estancias de vuestro hogar. Dad rienda suelta a vuestra imaginación y ¡disfrutad!